Brasil dio por terminado el brote de la enfermedad de Newcastle en aves de corral que bloqueó sus exportaciones de carne de pollo. El fin de la situación de emergencia sanitaria fue notificado a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).
El gobierno ahora espera la aprobación de los importadores para levantar los embargos comerciales asociados con el brote, dijo el Ministerio de Agricultura en un comunicado. El gobierno brasileño suspendió las exportaciones de carne de ave y productos avícolas a 44 países por al menos 21 días el jueves 18 de julio, cuando fue detectado el caso de enfermedad de Newcastle en una granja del municipio de Anta Gorda.
“Por supuesto que el Ministerio de Brasil trata de relativizar la gravedad del tema” pero “hay que tomar esto con muchísima seriedad y preocupación”, señaló Federico Stanham, director ejecutivo de la Cámara Uruguaya de Procesadores Avícolas (Cupra).
“Lo que hemos planteado al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca es que se hagan los análisis de riesgo que correspondan, que se estudie la información de Brasil en detalle”, comentó
El lobby brasileño de la carne, ABPA, recibió con agrado la notificación y afirmó que puede acelerar la reanudación de las exportaciones de pollo, que se detuvieron parcialmente después de la comunicación de un caso aislado de enfermedad de Newcastle.
Brasil es el principal exportador de carne aviar del mundo con 35% del volumen comercializado y segundo productor del mundo detrás de Estados Unidos. Este año se espera embarcar unos 5 millones de toneladas de carne de pollo por unos US$ 9.000 millones.
Las restricciones al comercio exterior varían según el acuerdo comercial con cada país. Uruguay solo limita las importaciones desde Rio Grande do Sul, por lo que siguieron abiertos los canales comerciales con Paraná y Santa Catarina, los dos estados sureños que tienen mayor producción avícola en Brasil. Durante años la presencia de la enfermedad de Newcastle en Brasil fue un obstáculo para el comercio con Uruguay.
En China, Argentina, Perú, México y los países que integran la Unión Europea se limitó el ingreso de carne de pollo y productos avícolas de todo Brasil. La restricción menos amplia, que se aplica a un radio de 50 kilómetros desde el brote de la enfermedad fue adoptada por Japón, Corea del Sur e Israel, entre otros destinos. En el peor de los casos la pérdida podría ser de 50 mil a 60 mil toneladas de pollo por mes, mientras dure el embargo, principalmente de Argentina y China.
En el criadero afectado, que había sufrido daños por las históricas inundaciones de mayo y no estaba en las mejores condiciones, se recolectaron 12 muestras en un total de 14 mil aves, de las cuales sólo una presentó resultado positivo. Los resultados de las pruebas de laboratorio descartaron nuevos casos en la región. Cinco casos sospechosos dieron negativo al virus patógeno.
“Lo que hicimos fue cerrar el estado y demostrar que no hay otros casos, que este fue un caso aislado. En la granja que tuvo el caso solo se encontró el virus de Newcastle en un animal. Se cumplió el protocolo, exterminar a los animales, enterrar, aislar; todo eso se cumplió con transparencia, lo que nos permitirá abrir rápidamente los mercados”, dijo el ministro de Agricultura, Carlos Fávaro.
En los últimos tres años Brasil ha sido el principal proveedor de carne aviar a Uruguay. En el primer semestre de 2024 el 46% de las 1.882 toneladas importadas procedieron de Brasil, principalmente de Rio Grande do Sul, según datos de INAC.
En 2024 la importación está 42% por encima de los volúmenes ingresados en el primer semestre de 2023. Además de las compras a Brasil el 42% procede de Argentina, 9% de Chile y casi 3% de EEUU.
La producción en Uruguay está en su nivel más alto de los últimos ocho años, 5,5% superior a la de 2023 hasta junio y 4,5% por encima de 2022. El precio no ha subido en los últimos días por esta situación. Según Cupra, en lo que va de 2024 el precio de la carne aviar tuvo una baja muy significativa, de entre un 12,5% al consumidor y un 19,7% al distribuidor.
De las 80 mil toneladas de carne de ave que se consumen cada año en Uruguay solo entre 4% y 5% es importada.