El Banco Central del Uruguay (BCU) envió al Ministerio de Economía y Finanzas un anteproyecto de ley que propone modificaciones a su Carta Orgánica apuntando a fortalecer la protección del inversor.
En proyecto propone ampliar el ámbito de regulación y control del BCU para incluir a las entidades que, aún sin emitir valores, realicen operaciones financieras convocando a la inversión mediante la captación masiva de recursos financieros del público. Es decir, cuando exista un desembolso de fondos a cambio de una promesa de rentabilidad futura, gestionada por un tercero.
Esta reforma propone además reforzar las facultades de la Superintendencia de Servicios Financieros del BCU para investigar y actuar frente a potenciales infractores. Tendría potestad para pedir información y realizar inspecciones con atribuciones similares a las de la Dirección General Impositiva, donde además no podrá ser oponible el secreto profesional. Y ordenar el cese inmediato de actividades irregulares así como suspender campañas publicitarias o la captación de fondos.
Además de los cambios propuestos para la Carta Orgánica, el BCU prevé profundizar otras acciones que tienen por objetivo proteger al inversor y dinamizar el mercado de valores, como acciones de comunicación y educación financiera que están orientadas a informar oportunamente a la población y prevenir conductas fraudulentas.
Respecto del mercado de valores, se apunta a una regulación escalonada que fomente el desarrollo empresarial, manteniendo como principios la adaptación a la realidad nacional, la eficiencia de costos, la protección del inversor y la eliminación de saltos regulatorios.
Vea el detalle completo aquí: Reforma propuesta por BCU