Por Eduardo Blasina
¿Cuáles son los precios de equilibrio de largo plazo de la ganadería uruguaya? En noviembre de 2019 precios en ascenso. Novillo gordo a más de US$ 4 y subiendo. En noviembre de 2020 novillo a menos de US$ 3 y bajando. El precio del ternero un año atrás arriba de US$ 3 por kilo y subiendo. Hoy abajo de 2 por kilo. Cual es un precio «normal» que conforme un gran promedio y permita ganancias equitativas a los diferentes participantes de la cadena. En torno a qué precios se puede conformar una situación ganar ganar entre las partes?
Un precio que se ha mantenido relativamente estable es el de exportación cerca de US$ 3.800 por tonelada. En este año US$ 3.785 por tonelada hasta el 21 de noviembre.
Con ese precio de exportación, un precio 10% menor de la carcasa de novillo es US$ 3.400, es decir US$ 3,40 por kilo. A ese precio con 53% de rendimiento, el precio en pie queda en US$ 1,80 por kilo vivo.
Y una relación de reposición cercana a 1,10 para el criador ubica el ternero sobre los US$ 2 por kilo vivo.
Una pregunta al lector refiere a si los supuestos de precios como equilibrios posibles y amigables de largo plazo es correcta. ¿Son estos los precios más factibles sin pandemia y con clima normal? ¿Dan un margen equitativo y suficiente a empresas bien manejadas en cada eslabón?
Una tercera pregunta para manejar hipótesis es cómo lograr que una oscilación en torno a esos precios no sea tan violenta como lo ha sido tantas veces en estos tiempos y en el pasado.