Lluvias leves el 17 de setiembre, de mantenimiento, y luego precipitaciones importantes el 2 y 3 de octubre como para prolongar un buen momento, excelente para las pasturas y mejorando el panorama para los cultivos de invierno que cuentan con buenas temperaturas.
Pero el riesgo sobre el final de la primavera se mantiene porque la temperatura en el Océano Pacífico sigue bajando. La Niña puede presentarse en octubre.