A pesar de que los precios de exportación se mantienen más interesantes que dos meses atrás y que el precio de Brasil sube achicando la brecha respecto a los precios en Uruguay, en el mercado local se va consolidando una baja de precios que obliga a negociaciones arduas y mantiene a varios frigoríficos trabajando en base a su propia oferta de corrales.
Esta situación ha llevado a alguna leve baja en el mercado de terneros, pero no en otras categorías.
Un mercado con muy poca oferta y productores apostando a ganar kilos con vacas en el eje de US$ 3,65 y US$ 3,70, mientras los novillos en el eje de US$ 3,85 con un mercado muy trabado.
Todo debe negociarse lote a lote y modificando las ofertas iniciales de la industria para cerrar los pocos negocios que se concretan con una diferencia grande entre lo ofrecido y las pretensiones de los productores.
Varios frigoríficos procesando los novillos de sus propios corrales mantienen al mercado trancado, con los productores esperando compensar con kilos una lógica de baja de precios que puede persistir hacia adelante.
Las lluvias le dan margen a los productores para apostar a compensar con kilos el ajuste de precios ya que en la mayoría del territorio hay una mejora importante del estado de praderas y verdeos.
Aunque el mercado de reposición mantiene la estabilidad habitual, se notó algo más de pesadez en las ventas de esta semana ya que la relación de reposición tiene una desmejora importante.